Casa Guadalmina
El office es el corazón de la vivienda. Es la recepción y el punto de encuentro entre salón y cocina. Abrazado por un banco corrido de madera de roble a un lado y una gran caja de madera de manzano en el otro, es el lugar ideal para desayunar, elegir el vino o recibir a un invitado.
Marbella
Interior
2014
Esta vivienda de verano, situada a orillas del Mar Mediterráneo en la costa Marbellí, es el resultado de la unión de dos viviendas colindantes a través de sus salones. La vivienda dispone de cinco dormitorios con cuarto de baño y vestidor incorporados, una amplia terraza y un gran espacio fluido que incluye la cocina, el office, el salón y el comedor.
Se trata de un proyecto de interiorismo desarrollado en colaboración con Sagaseta y Pedro Peña. El sofisticado diseño del mobiliario unido a una arquitectura sobria y respetuosa con el entorno hacen de esta vivienda un hogar fresco y espacioso, perfecto para los calurosos meses del verano.
El acceso a la vivienda se realiza por medio de un recibidor amplio desde el cual se percibe, el estar y el comedor a la derecha, y el generoso office a la izquierda. En este espacio enseguida llama la atención la calidez que desprende la atmosfera generada por las diversas maderas empleadas para dicho office. La tarima de roble del suelo, el banco corrido de la misma madera y el gran mueble de almacenaje acabado en madera de manzano se correlacionan, haciendo de este espacio un lugar cercano.
Detrás de este gran armario se encuentra la cocina. Un espacio amplio en el que predomina el color blanco de la isla y la bancada. Un gran ventanal ilumina la cocina desde el sur, la luz penetra reflejándose en el blanco de los muebles y en la madera de roble del suelo, creando un agradable ambiente cálido y luminoso.
La transición entre este espacio y el área del estar y el comedor se realiza de forma fluida, sin cerramientos ni puertas intermedias de forma que la casa pueda ser recorrida de forma muy intuitiva por parte tanto de propietarios como invitados, eliminando estancias intermedias oscuras. La posición estratégica del armario, ya mencionado, permite dotar de una cierta intimidad al aseo de invitados, situado junto a la zona de noche.
La pieza central de la vivienda la ocupan el salón y el comedor, lo cual guarda una estrecha relación, con la finalidad de la vivienda, de ser vivida y compartida en los espacios de uso común, incluyendo la terraza.
El salón y el comedor, separados por una estantería, forman una única estancia. Los muebles, de gran tamaño, están distanciados entre sí para crear una mayor sensación de amplitud. Tan solo vaporosas cortinas de lino separan este espacio de la terraza. Una terraza que abarca todo el frontal de la vivienda, dando acceso al jardín a tres de los dormitorios. Sobre su suelo de madera de Ipe se colocan sofás y mecedoras de mimbre, combinados con coloridos cojines que contrastan con el verde claro del jardín.
