La madera contralaminada, el hormigón del futuro

La madera contralaminada, el hormigón del futuro

El hormigón nos ha ofrecido la posibilidad de construir estructuras de forma rápida y efectiva para conseguir alturas y luces antes impensables. En la actualidad, algunas tecnologías aplicadas a la fabricación de elementos constructivos de madera están empezando a entregar oportunidades similares, a las proporcionadas por el hormigón armado, como es el caso de la madera contralaminada o CLT.

El CLT se produce en forma de paneles construidos mediante la unión de tablas en capas perpendiculares entre sí. De esta forma se reducen a un mínimo irrelevante los grados de contracción y dilatación de la madera, mientras que la carga estática y estabilidad de los paneles mejoran considerablemente. Los paneles pueden utilizarse como muros o forjados, permitiendo alcanzar dimensiones de entre 2.40 m y 4.00 m de altura, y de hasta 12.00 metros de largo, en función de su espesor y número de capas.

En lo que a impacto ambiental se refiere, la madera no tiene competidor. El hormigón, por ejemplo, emite una tonelada de CO2 por cada m3. La construcción con CLT, tiene en cuenta un concepto nuevo en la industria de la construcción, el "carbón secuestrado". El árbol, mientras crece, se alimenta de carbono, por tanto, a pesar de toda la energía utilizada en el proceso de extracción y fabricación, la madera nunca llegará a igualar la cantidad de carbono que mantiene "secuestrado".

Los paneles de CLT funcionan como piezas perfectas, con un alto nivel de precisión. En su proceso de producción en fábrica todo está completamente decidido y predeterminado, y no es posible realizar ajustes en obra. Entonces, más que constructores, las personas que trabajan en una obra en CLT son montajistas, que deben articular piezas virtualmente perfectas. El CLT se comporta con la precisión de un mueble, trabajando con márgenes de error de 2 milímetros.

Mientras la etapa de proyecto puede demorar un poco más, el montaje es de una velocidad sorprendente: en el caso de una casa de 200 m2, el montaje puede demorar 5 días y ocupar una mano de obra mínima (al rededor de 4 personas instruidas).

Los paneles de CLT están permitiendo actualmente la construcción de edificios de hasta 30 pisos, en Canadá, y de hasta 40 pisos en Finlandia. Nuestro estudio ya está inmerso en el mundo del CLT a través de dos proyectos de viviendas en altura promovidos por el Gobierno Vasco en Bilbao. El futuro es prometedor y seguiremos atentos a sus avances. Quizás en algunos años nuestras ciudades se vean inundadas por la calidez y la textura de la madera, cambiando además la manera en que se concibe el diseño y la construcción de nuestras obras.

Créditos fotográficos: ARCH-EXIST, Wiki World, Naho Kubota Photography, Tom Harris, Schnepp Renou, Hervé Abbadie, Diana Snape, 矢野紀行. Las fuentes de las fotografías son las websites plataformaarquitectura, archello y homify.

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